Maíz transgénico
La Dra. Ana Wegier Briuolo, investigadora del Jardín Botánico del Instituto de Biología de la UNAM, nos explica que los transgénicos son tan sólo una herramienta de laboratorio llamada ingeniería genética que puede llegar a ser tan mala o tan buena como la luz eléctrica, se puede utilizar para muchas cosas y de muchas formas. Visto tan sólo como un instrumento que puede incrementar y acelerar la producción agrícola parece algo bueno para la gente que cultiva. El problema aparece cuando uno ve los problemas de una forma más integral, entonces tenemos que analizar a fondo cuáles son los impactos de estos cultivos en un área particular. No podemos ver solamente al cultivo, es muy importante que se entienda al contexto socioeconómico y cultural: todo lo que está al rededor.
Cuando se introduce una semilla modificada en el campo, habilitada con defensas, no sólo la hace desenvolverse mejor en ese ecosistema sino también, predominar sobre las demás especies originarias. Puede destruir el delicado balance que mantenía esa zona. Por eso se debe estudiar el impacto que puede tener, crear marcadores, hacer estimaciones a mediano y largo plazo, para determinar si es prudente llevar a cabo esa cosecha. “Mientras conocemos cómo se origina y se mantiene la diversidad genética nosotros podemos utilizar eso para saber cómo cuidarla.” dice Ana Wegier.
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