Camino Real: una ruta comercial del siglo XVI

El Camino Real de Tierra Adentro, también conocido como el Camino a Santa Fe, era una ruta comercial de 2560 kilómetros de longitud que iba desde la Ciudad de México hasta la ciudad de Santa Fe, Nuevo México, EE. UU. de forma activa desde mediados del siglo XVI hasta el siglo XIX.

Utilizado entre los siglos XVI y XIX, este camino servía para transportar la plata extraída de las minas de Guanajuato, Zacatecas, y San Luis Potosí, así como el mercurio importado de Europa

Una vez sometida la gran Tenochtitlan, los conquistadores iniciaron una serie de expediciones con el propósito de expandir sus dominios y obtener mayores riquezas para la Corona española. Al principio siguieron los senderos con las frágiles huellas de los nativos que intercambiaban mercancías entre el norte y el sur.

Los investigadores Enrique Lamadrid, Jack Loeffer y Tomás Saldaña, cuentan la historia del Camino Real como el más antiguo de Norteamérica: «Los caminos reales fueron las rutas principales de transporte para la comunicación, el cambio cultural y el comercio. El ejército virreinal, organizado en compañías volantes de caballería ligera, protegía a los viajeros, el ganado y las mercancías»

En abril de 1598 —señalan los investigadores— «un grupo adelantado de soldados se pierde en el desierto al sur del Paso del Norte, buscando la mejor ruta al río Bravo. Un indio cautivo llamado Mompil trazó en la arena un mapa del único paso seguro, que pronto formaría parte del Camino Real de Tierra Adentro». Es en este año, cuando este grupo, principalmente liderados por el novohispano Juan de Oñate,5​ consolidaron y ampliaron el trayecto hasta lo que hoy es Santa Fe, capital de la entonces provincia de Nuevo México, en ese momento, parte de la Nueva España.

Cabe destacar que existieron cuatro troncales, o rutas principales, de Camino Real, que unían la Ciudad de México con Acapulco, Veracruz, Audiencia (Guatemala) y Santa Fe: «Conformaban una cuádruple ruta repleta de caminantes, carretas y recuas de mulas». De estas se deriva el Camino Real de Tierra Adentro, que era el que iba hacia el norte.

El Camino Real de Tierra Adentro siguió una ruta marcada por el terreno: «La actividad volcánica y un clima inclemente labraron una tierra rica en depósitos de plata, cobre, oro, ópalos, turquesas y sal. Los desplazamientos de las placas tectónicas abrieron en el centro de Nuevo México una grieta de más de kilómetro y medio de profundidad, la segunda más larga del mundo. Las aguas del deshielo que fluían hacia el valle formaron el río Bravo y éste fue llenando con sedimentos la profunda brecha».

Fue trazada por Fray Sebastián de Aparicio en 1542, el mismo que mandó a hacer la Ruta México- Acapulco en 1540 y el Correo Real, la ruta que comunicaba del puerto de Veracruz a Orizaba, Puebla y la Ciudad de México.

Imagen de portada:

https://www.google.com/url?sa=i&url=http%3A%2F%2Fwww.esascosas.com%2FAficiones-Temas%2Faficiones%2Frutas-y-vias%2F&psig=AOvVaw3jqbLqNhMMWL2ibV0UrbUr&ust=1591725134930000&source=images&cd=vfe&ved=0CA0QjhxqFwoTCLiS2LPk8ukCFQAAAAAdAAAAABAD

Deja una respuesta